Hacía mucho tiempo que no compartía ningún piso pequeño, cuando en realidad es una de las categorías que más me gusta. Y es que estoy totalmente convencida de que podemos sacar provecho de los espacios pequeños con imaginación y ganas, y que podemos convertirlos en lugares cómodos y acogedores. Claro que quizás nos gustaría tener una casa más grande, pero vamos a intentar disfrutar de lo que tenemos al menos, ¿no?
Este piso de 50 metros cuadrados en Estocolmo me ha encantado. Como siempre, el truco principal para crear ilusión de espacio consiste en utilizar el blanco como color principal, grandes ventanas que dejan entrar la luz, tener pocas habitaciones y los muebles justos. A todo esto, además, se añaden pequeños detalles personales que crean calidez y personalidad propia. En este caso serían el papel pintado y cojines del salón, los marcos del comedor, las letras de madera y, cómo no, las plantas.
¿No os parece perfecto para resguardaros del frío invierno?
Vía Planete Deco
Que maravilla de apartamento . Para mi es de gran genialidad lograr belleza en pocos metros. Tu blog me ha encantado
ResponderEliminarMuchos saludos
Angelica
¡Muchas gracias, Angélica! Me alegro mucho de que te guste. Seguiremos trabajando deseando que os siga gustando ;)
EliminarUn abrazo